Reunión del G6 en la BCBA
El habitual encuentro mensual de los integrantes del denominado Grupo de los Seis, tuvo lugar en esta oportunidad en la Bolsa de Comercio de Buenos Aires y contó con la presencia de Jorge Brito por la Asociación de Bancos Argentinos, Carlos R. de la Vega por la Cámara Argentina de Comercio, Enrique Wagner por la Cámara Argentina de la Construcción, Hugo Biolcati por la Sociedad Rural Argentina, Ignacio de Mendiguren por la Unión Industrial Argentina y de Adelmo Gabbi como anfitrión.
Entre los diversos temas de la actualidad nacional que consideraron los asistentes se encontró en primer término el resultado de las últimas internas obligatorias y su implicancia en las próximas elecciones nacionales. A su vez, la consideración de la situación económica del país en el contexto de incertidumbre que afecta a la economía mundial, permitió concluir que el muy buen nivel de actividad que expone la economía argentina haga propicio este momento para arribar a un consenso pleno, en el que todos los actores de la sociedad, sean públicos o privados, hagan sus mejores esfuerzos para ajustar aquellas cuestiones que podrían socavar en un futuro los buenos indicadores logrados. Entre estos tópicos estimaron preocupantes la competitividad de nuestras exportaciones ante un horizonte de probable recesión mundial y el riesgo de que los actuales valores de intercambio con nuestro vecino Brasil se puedan ver afectados. A tal fin se destacó la necesidad de promover mecanismos que incentiven más la inversión y que permitan a los factores productivos aumentar fuertemente su oferta de bienes y servicios como mejor herramienta para promover la producción nacional eficiente, bajando la expectativa inflacionaria e incrementando el empleo. Y en ese orden, se entendió necesario aumentar la potencialidad por parte de las empresas nacionales de financiarse en el exterior, posibilidad que se vio afectada por la declaración de nuestro mercado de capitales como mercado fronterizo, y advirtiendo que Argentina tiene condiciones inmejorables para complementar el financiamiento local con el internacional en particular los proyectos productivos, evitando movimientos especulativos de corto plazo. Igualmente, sobre la base de que el cuidado del equilibrio de costos de las empresas es fundamental para que la productividad y rentabilidad sean el motor de esos incentivos a la inversión, advirtieron sobre la necesidad de tener una política consensuada en el tratamiento de los incrementos de salarios relacionados con la productividad y una carga impositiva acorde que los promueva.
En este sentido, las acciones que incrementen los costos del comercio exterior, como el caso del denominado TAP (Transporte Argentino Protegido) además de su mantenimiento, afectan la competitividad de la producción y el empleo argentino.